Retén y atrae el talento que tu empresa necesita
El mundo laboral se mantiene en constante evolución, los retos que las empresas, empleadores y colaboradores viven año tras año son diferentes y uno de ellos es la gestión del talento.
Durante mayo del 2021 se creó un nuevo término “La Gran Renuncia”, un fenómeno mundial que responde a diversas inquietudes de los trabajadores con respecto a sus organizaciones, pues, según el Foro Económico Mundial, 1 de cada 5 trabajadores planean dejar sus trabajos de forma voluntaria en los próximos años, al no sentir equilibrio entre la oficina y su vida o por no sentirse valorados en sus empleos actuales.
Luego de casi tres años de pandemia, las personas han comenzado a replantearse la idea del trabajo presencial, la incursión del home office hizo que valoraran más el tiempo con la familia, así como el hecho de no desplazarse a un lugar de trabajo para realizar algunas actividades que se pueden hacer desde casa, adicional, el punto clave está en el salario, 71% indicó que es el principal factor para reconsiderar en dónde trabajar.
¿Cómo retener a colaboradores y atraer talento?
La atracción y retención de talento debe de ser gestionada como una estrategia conjunta, no como factores aislados. Dicha acción contribuye al crecimiento y diferenciación de la empresa incluso contra la competencia.
Ver a los colaboradores como parte trascendental de la empresa como a los clientes es importante para su fidelización pues al igual que traer nuevos leads es costoso, la rotación de empleados significa una gran inversión.
Según el estudio realizado por ManPower Group y Porter Novelli, el propósito de la empresa es clave para atraer y retener talento, va más allá de la misión y visión se trata de una manera de ser para convertirse en “marca empleador”, aquella organización que desarrolla una reputación en gestión con colaboradores que están interesados en vivir los objetivos de la organización si coinciden con ellos.
Para desarrollar este propósito organizacional es fundamental responder estas preguntas como empresa:
- ¿Cómo somos?
- ¿Qué nos distingue?
- ¿Cómo impactamos la carrera de nuestra gente?
- ¿Qué hemos logrado como compañía?
- ¿Cómo impactamos a la sociedad?
Dicha investigación encontró que las personas relacionan a las marcas con propósito de manera positiva, indicando que son organizaciones éticas, responsables y que conectan con los consumidores finales a nivel emocional, menciona que debe ser más que una táctica de mercadeo, se debe crear un sentimiento articulado y profundo para conectar con los colaboradores.
¿Cómo realizarlo?
- Define la competencia de los empleados. Para identificar el talento hay que saber las competencias clave, conocimiento y habilidades que los trabajadores necesitan, es vital a largo plazo para la compañía.
- Contrata al talento adecuado. Una vez identificadas las necesidades y habilidades que requieren, contraten el talento con base en conocimientos y habilidades estratégicas para dichas posiciones.
- Evalúen el desempeño. La retroalimentación en las organizaciones es importante para mantener el nivel y características del talento que se requiere.
- Apoyo a empleados para su desarrollo personal y profesional. Se trata de diseñar programas para capacitar al talento en habilidades duras y blandas, además de ser una motivación la formación ayuda en actualización y aprendizaje de nuevas habilidades.
- Sueldos justos. El salario emocional cada vez cobra más importancia, sin embargo, el salario es determinante para hacer carrera en una organización.
- Creando un buen ambiente laboral. Trabajar en una empresa que se preocupa porque exista respeto y convivencia sana, es medular para la obtención de objetivos conjuntos.
- Con beneficios atractivos. Flexibilidad de horario, vales para despensas, seguros médicos, bonos e incentivos en función del rendimiento ayudan a los trabajadores a sentirse valorados.
- A través del liderazgo. Tal vez uno de los puntos más importantes, hoy se necesita ser liderado por directivos y trabajadores que escuchen a sus equipos de trabajo.
Construir una organización donde los colaboradores se sientan escuchados, comprendidos y valorados no es una tarea que se construya con facilidad, sin embargo, utilizando la estrategias adecuadas y creando los canales idóneos, lo pueden realizar.
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